Y el Grammy es paraaa...Amy Winehouse!!!!

Personalmente, nunca he podido lograr la impecabilidad. Creo que el toque de desastre está en mis genes. Soy así: naturalmente desaliñado, instintivamente extraño. Pero bien inteligente.
Hoy celebro los rasgos nerdos con los que nací. Siempre he sido el de la bragueta abajo, el del pelo afro revuelto o el de la mancha en la corbata...y también el overachiever de los dieces.
Siempre y en todo lugar tiendo a identificarme con esos personajes más bien freaks. Shaggy en Scooby Doo - ése sería yo. O Yurem, o el joven manos de tijera, o Ron Weasley...

Y esa es una de las muchísmas razones por las que estoy feliz con el triunfo de Amy Winehouse. Creo que su música sí es lo mejor que ha salido últimamente en todo el mundo. Su voz y calidad interpretativa hace que sus letras vayan desde lo divertido hasta lo suave y deprimente...
Y claro, tiene ese dejo de imperfección que me hace de alguna verme identificado, guardando las proporciones. Ya era hora de que los weirdos tuviérmos un ícono que nos representara, haciendo ver al mundo que eventualmente les vamos a quitar la chamba y las novias top models.
Amy no pudo asistir a la ceremonia en L.A. porque le denegaron la visa y para cuando se la autorizaron ya era demasiado tarde para planear el viaje. Típico.
Hoy, al verla cantando en vivo desde Londres, ganando casi todos premios del año, me dio esperanza porque también estoy luchando, con todo y la imperfección nata, para que la gente deje de darle importancia a la mancha de mi corbata para enfocarse en mi trabajo. Ojalá los asiáticos de la embajada en la que trabajo premiaran a los Winehouse de la oficina. Esta noche, sí ganó quien merecía ganar.
Por cierto, creo haber visto la mejor entrega de Grammys ever. No se apareció el imbécil de Justin Timberlake a pegar chillidos dándoselas de "artistazo" y "talentoso" como acostumbra. Y así, fuera de 'Fantasia Barrino' (ew), no hubo desastres que arruinaran la noche.
Ah, Daughtry merecía - por mucho - ganar mejor álbum de rock. Pero bueno, yo tampoco tengo el reconocimiento laboral que necesito. Ya somos dos, Daughtry. Let's keep on rockin' anyway...
Mi esposa Alicia Keys acaba de tirar la ley universal de que "nadie es perfecto". Ella sí. Díganme qué defecto le ven. Primero cantando con Frank Sinatra, y luego haciendo de este mundo un lugar mejor con la hipnótica No One.
Sumándose al desfile de delicias de chocolate: Beyonce-qué-piernas-Knowles y Rihanna (una bomba erótica que además canta bien y promete comerse hasta las velas del pastel que dejó Britney desatendido).
Debo mencionar la breve y emocionante presencia de nuestro ídolo Juanes, artista entre los artistas.
Y bueno, hoy me voy a dormir, con el firme deseo de casarme con Alicia Keys, pasar la despedida de soltero con Rihanna y claro, que Andrea Bocelli y Josh Groban nos canten en la ceremonia y la gran Amy Winehouse amenice la velada...