lunes, 14 de noviembre de 2005

Recolectando señales

Escribo inusualmente pronto, porque muy afortunadamente anoche tuve voz de profeta, y he de compartirlo. En efecto, me esperaban señales.
Resulta que el sábado, vino mi amiga Pamela hasta mi casa, a dejarme un sobre con palabras muy sabias, desde las cinco de la tarde. Hasta anoche (domingo), el otro policía se acordó y me entregó el sobre. Lo que me gustó más:
"Dije - Dios, es una pérdida tan grande.
Y Dios dijo - Ví al mío clavado en una cruz.
Dije - Dios, pero tu ser más querido vive.
Y Dios dijo - El tuyo también."
En fin, el caso es que literalmente estas palabras, por descuido del policía, me estaban esperando para abrazarme, mientras yo escribía lo de ayer.
También un comentario de Dalya, quien ha demostrado tener buen oído ;), en el que me promete precisamente un abrazo. Y así, encuentro señales en el taxista, en mi madre, en mis alumnos, en una foto mía de niño...Y me sentí muy bien.
Gracias a todo.
Hoy cierro el día con esperanza.

1 comentario:

Nessa Yávëtil dijo...

¡Hola Jesús!
Aquí ando de nuevo visitándote. Leo que estás pasando por un momento difícl, no sé precisamente por qué, pero entiendo que es una pérdida... Y las fechas que recuerdan las pérdidas de cualquier tipo son difíciles. Se siente una gran impotencia y frustración cuando no es posible controlar las situaciones, pero hay que entender que al final todo tiene un lugar... y aceptarlo.
No sé si este comentario tenga algún significado en el contexto, ojalá si.
Te dejo el link a mi blog.
Julieta