martes, 29 de mayo de 2007

Música_de_este_año.mp2007

Para iniciar una tradición y suponiendo que este blog dure mucho tiempo, aquí va la lista de las mejores canciones que salieron desde mediados del año pasado hasta la fecha, según yo.

1. James Morrison - The Pieces don't fit anymore.
Color: Transparente, gris claro o violeta tenue. - Elemento: aire (en calma, asentándose)
Simplemente hipnótica. Sentimental. Perfecta. Nostálgica. Masterful. Maravillosa. Basta con leer Sed para entender mi sentir hacia este enorme tema. Atención a James Morrison (You give me something, If the rain must fall) que escribe su propia música: ya viene para este lado del charco, bien dirigido será algo grande.
2. Mika - Grace Kelly
Color: multicolor (predominan los neones y los chillantes) - Elemento: fuego
Just because what everybody wants is to catch a catchy good tune. Pop y rock se mezclan respaldados por una imagen caricaturesca, colorida, original, ecléctica y retrospectiva. Atención a Mika (Lollipop, Love today): sin duda será una superestrella. Es el siguiente Elton y/o Freddie y/o Geroge Michael. Todo el disco es genial.
3. Everything - Michael Bublé
Color: azul del bueno - Elemento: agua o tierra suave
Para mi gusto el mejor intérprete del mundo. Porque la música tiene que sonar a música y este es el ejemplo perfecto de voz, tempo, género, interpretación, tema, etc. de música que parece música, con un toque delicioso de frescura. Claro, ya entra en Adult Contemporary. Atención a Michael Bublé (Home) : Ya es el mejor cantante del mundo, cuestión de tiempo.
4. Paolo Nutini - Last Request
Color: granate - Elemento: lodo
Una excelente canción romántica que no está empapada de pop. Orgánica. Se trata del tercer cantautor británico que llega a esta lista (bueno Mika nació en Líbano). Atención a Nutini (Loving you, Million faces, These streets): es el primero de esta saga de supertalentos jóvenes que llegaron después de James Blunt y lo superaron por mucho.
5. Roger Cicero - Ich atme ein
Color: obscuro veteado Elemento: tierra ceniza
Con sombrero, banquito y micrófono a lo Sinatra, pero en alemán. Swing y jazz del bueno, pero con un toque nuevo. Transmisión clara de sentimiento hasta para quienes el alemán es una lengua ajena. Atencion a Roger Cicero (Murphys Gesetz, Du willst es doch auch): antes era un poco under, pero acaba de participar en el festival de Eurovisión con Frauen regiern'n die Welt, lo que seguramente le va a dar mucha más exposición, por lo menos en Europa.
6. Take That - Shine
Color: plateado o negro con dorado - Elemento: aire fuerte, de noche
Entre el mar de pubertos que está teniendo ´exito, fama, dinero y reconocimiento, aquí están los ya cuarentones de Take That con el mejor tema de toda su carrera, para recordarnos que también se puede hacerla de viejo como los mortales. Si Mercury resucitara y hubiera que invitarle un martini en una fiesta, ésta cancion sería ideal de fondo. Lejos del sonido boyband pero sin salir de lo comercial, un piano excelentemente ejecutado y con toques de glam y rock de los 70's, la agradable voz de Mark Owen se oye mejor que cuando tenía 25.
7. Nelly Furtado - Say it Right
Color: luminoso - Elemento: tierra
Con uno de los mejores planes de marketing de todos los tiempos, y más guapa que nunca, Nelly Furtado llega a esta lista (como la única mujer este año) con uno de sus temas más versátiles: se puede escuchar en el coche, en la regadera, en la oficina, o en un desfile de modas. Más atención no es necesaria para ella; multicultural, multilingüe, autora de su propia música y simplemente perfecta.
8. Camila - Todo cambió
Color: miel Elemento: fuego (lento)
Desgraciadamente el único tema en español. Simplemente fue el único que en mi opinión estaba a la altura de los demás. Con excelente instrumentación, una canción melosa que seguramente nos hará hartarnos de sus originales voces andróginas, porque no se ve la fecha en que la dejen de pasar una y mil veces por todas partes, y seguramente ya es el clásico en la vida de muchas parejitas. Atención a Camila (Me da igual): porque no son el nuevo "Sin Bandera", ellos son mucho mejores y más pegados que los anteriores a lo wannabe alternativo.
9. The Feeling - Fill my little world
Color: azul cielo con toques soleados - Elemento: aire
Otra vez, una excelente fusión de pop y rock. Una especie deColdplay en su version easy listening. Ideal para escucharla en el coche un día de verano. Atención a The Feeling (Strange, Love it when you call, Never be lonely): tambien británicos, son uno de los mejores grupos poperos de los últimos años.
10. Zero Assoluto - Sei parte di me
Color: turquesa - Elemento: agua
En italiano, con una guitarra muy agradable, este tema tranquilo al parecer no es tan famoso en Italia como fuera. La voz no es excelente pero sigue siendo de alguna manera relajante. Atención a Zero Assoluto (Era settembre, Svegliarsi alla matina): han participado en el festival de San Remo y acaban de hacer una colaboración con Nelly Furtado en la edición italiana del disco de la canadiense.
Menciones especiales por la letra:
Volován - Monitor (esta quizás pudo haber entrado a la lista)
Faudel - Mon Pays
P!nk - Dear Mr. President
Jesse&Joy - Volveré
Menciones especiales por la música:
Roger Cicero - Zieh die Schuhe aus
Rhythms del Mundo - Todo el disco

miércoles, 23 de mayo de 2007

Antes de mí

"I think I'm paranoid (and complicated). I think I'm paranoid. Manipulate it..."
Garbage, I think I'm paranoid, Version 2.0, 1998.
Ya es tiempo de empezar a escribir sobre esto. Hora de dejar constancia en algún lado por si algún día escribo unas memorias, antes que sea demasiado tarde. Espero, que alguien pueda sentirse igual, y no ser el único. Porque una característica omnipresente en toda situación o ámbito es que llegué tarde a todo. A todo.
Si es que tengo un reloj biológico, definitivamente está muy lejos de estar sincronizado con el reloj universal. Soy ese que llega a los bares media hora antes de que cierren, cuando todas las colillas están ya en el suelo, los borrachos van de salida y con suerte sólo da tiempo de beberse un traguito. Y rápido porque el mesero bosteza en la cara y avienta la cuenta.

El asqueroso cliché de "todo tiempo pasado fue mejor", parece ser una realidad punzo-cortante en mi vida, porque para fines prácticos, y si mi percepción no me falla: "todo tiempo antes de mi llegada fue mejor".
Soy y fui parte de países, colegios, épocas, sociedades, instituciones...de las que ya solamente queda el prestigio, de las que se ve que hubo un auge y una grandeza en su momento, pero que por alguna razón ya no. Toda mi vida me pareció estar en déjà-vu escuchando a cada profesor: "Ustedes han sido el peor grupo que he tenido, y tú, el dolor de cabeza más fuerte, el más cínico, el más descarado". Uuuuy joven, si hubiera llegado unos cinco minutitos antes... es una especie de mantra en mi existencia.
Soy siempre el que rompe con la tradición y no salió conservador como todos sus respetables ancestros. El que se enamora de las que se van de viaje, el que se fija en las que justo un segundo antes de conocerlo eran maravillosas, pero un segundo después de decirle el mucho gusto se descomponen e inician su camino hacia la demencia. El que escribe un post la noche en la que ya nadie regresa a su blog porque todos ya se cansaron de regresar buscando algo nuevo.
Y entonces, el aún más asqueroso cliché de "maybe it's me" aprieta. Retumba. Parece que se me dio el don natural de desquiciar, destruír, separar, derribar.
O eso me dice mi paranoia: Antes de mí, por regla general, la gente en las oficinas y escuelas y cursos era buena, se tomaba de las manos y cantaba el himno a la alegría bajo el arcoirirs...pero ahora ya no. Ahora se pelean, no se llevan, se amargaron, se distanciaron, se apagaron. Y el ahora y mi llegada coinciden el 99% de las veces.
Me pregunto si hay alguna deficiencia en mi sistema que inconscientemente me obliga al conflicto, a la división, a la ruptura con los tiempos buenos, a ser el que corta el listón e inaugura la decadencia.
Si mis facultades no me fallan, traigo la semilla del combate puesta, tatuada; y mucho me temo que, si me la quito, se acabó mi esencia para conmigo mismo y para con el resto de la recientemente abatida y partida comunidad donde me encuentre.

sábado, 12 de mayo de 2007

Molitvá

"K'o luda, ne znam kuda, ljubavi se nove bojim,
a dane, žive rane, više ne brojim.
Molitva, kao žar na mojim usnama je,
Molitva, mesto reèi samo ime tvoje.
Nebo zna, kao ja, koliko puta sam ponovila,
to nebo zna, baš kao ja, da je ime tvoje moja jedina
Molitva... "
Marija Serifovic
Repite conmigo mo/lit/vá.
Sí, repite.
Ya sé que muchos spots publicitarios te piden que hagas cosas y no te da la gana, pero yo nunca te he cobrado por leerme, y nunca lo voy a hacer. Esto es un regalo.
Existen palabras que son como poemas. Que son más melodiosas que canciones.
Ahora sí repite conmigo: Molitvá. Canta: Mo-lit-va.
. Moo . lit . váa . ...
En serbio, molitva significa oración. Precioso, ¿no?
Si pusiéramos en una licuadora mis tres "áreas de interés profesional", a saber: la música (pop[ular]), las relaciones internacionales y la comunicación, depués de un buen rato podríamos vertir el festival de Eurovisión en nuestro vaso.
Me fascina oír canciones en idiomas distintos, me emociona adivinar qué país vota por cuál, escuchar los distintos presentadores anunciando resultados en francés e inglés desde las distintas capitales europeas.
Recientemente, la migración y la entrada de nuevos países de la ex-Rusia y la ex-Yugoslavia han hecho más reñida, interesante y encantadora la experiencia. Desde el punto de vista sociológico, es increíble explicarse las razones del voto de cada país por otro (Alemania siempre vota Turquía por los muchos inmigrantes turcos, lo mismo con España votando por Rumania. Chipre generalmente se decanta por Grecia pero de repente se va hacia Turquía. Igual, los países hermanos siempre se apoyan: los güeritos finlandeses votan por los güeritos suecos o daneses o noruegos, los francófonos por los otros francófonos, Rumania con Moldavia y Bulgaria, Austria y Suiza con Alemania, Belarús con Rusia y Ucrania, la Ex-Yugoslavia con la Ex-Yugoslavia).
Ya es sabido que a pesar de que mi preferencia por default está en España, hay algo en la victoria de un país pequeño que me hace vibrar. Por eso estoy predispuesto a que me guste la propuesta bosniaca o letonia, por ejemplo.
Así que hoy, cuando oí los primeros acordes del tema de Serbia (sin Montenegro ya, qué triste por cierto), pensé que se trataba de algo normal. Una mujer fea, de nombre Marija Šerifovic, vestida con un traje negro cantaba profundo como una catedral, tiernamente heróica. La música, fuerte y solemne, dulcemente balcánica, me atrapó. Y entonces, cantó:
Molitva...
En su idioma, ella decía: Oración, tu nombre es algo que admiro, Plegaria, el cielo sabe cuántas veces te he llorado, el cielo sabe que sólo rezo por ti.
Pero nosotros no teníamos ni idea del significado de lo que ella pronunciaba intensamente.
Para cuando las flautas yugoslavas sonaron a mitad de la canción, la emoción estaba a punto de hacer reventar las puertas y ventanas del cuarto de la tele, hasta que mi hermana dijo: estoy a punto de llorar.
Me pareció increible experimentar junto con ella una coincidencia de recepción de sentimientos transmitidos a través de la música: a mí me pasaba lo mismo.
Pero la sorpresa más grande fue, descubrir que prácticamente todos los votantes de las 24 naciones que vieron el Eurovisión quedaron igual de conmovidos que nosotros. Igualito. Cada país daba entre sus tres primeros a Serbia, la reacción a la maravillosa interpretación de esta mujer hacía imposible negar que aún en estos tiempos es posible enviar un mensaje que trasciende las lenguas y acariciar los sentimientos de culturas y personas distintas, a través de la voz humana.
Serbia ganaba, mientras mi hermana y yo, recibíamos el triunfo como nuestro. Imaginábamos lo mucho que debe hinchar al alma la emoción de una artista que viene de un país herido, accidentado, y acaba de ser declarada ganadora de un concurso que mira toda Europa.
Nos sentíamos identificados con muchos otros. Todos habíamos sentido igual.
Molitva, con su ritmo poético, hechizaba de esperanza a todos los que amamos ver triunfar a los pequeños, a los sangrantes.
Y como todo, los recordatorios ahí puestos, más claros que nunca: el poder de un sentimiento bien cantado, la presencia de países difíciles de ubicar en el mapa, muy por arriba de los grandes. Los últimos lugares: Francia, Reino Unido, Alemania y España. Los "cuatro grandes de Eurovisión", que tienen pase automático quedaron hasta atrás, aprendiendo que no hay que dormirse en los laureles ni dejarse envejecer; cara a los nuevos, manoteando y haciéndose espacio, abriéndose camino poco a poco, aunque sea en este ámbito.
Y al frente de todos ellos hoy estuvo Serbia. Y por ello, estoy muy contento. Molitvá.
Para bajar Molitva, aquí un link : http://ww1.rts.co.yu/euro/molitva.asp

miércoles, 9 de mayo de 2007

Comedia Famosa de ¿Quién eres tú?

Hablan en ella las personas siguientes:
(Por Orden de Aparición)

DON MURADÁS
DON EDUARDO
DON JESÚS
DOÑA MARÍA JOSÉ



Acto primero
[SALA DEL PALACIO DEL MAESTRE DON JESÚS]
El escenario está obscuro. A la derecha hablan (en off) Don Muradás y Don Eduardo.


MURADÁS: ...Pero está ruca ¿no?

EDUARDO: No, no está ruca.


A la izquierda habla (en off) Don Jesús.



JESÚS. No mames, no está nada ruca...






Acto segundo

[UN ASCENSOR METÁLICO]
La única escena se desarrolla dentro de un ascensor, que sube a la residencia obligada del Maestre Don Jesús y más arriba hacia la residencia de la cadena de vídeos MTV.



salen DON JESÚS, DON MURADÁS Y DON EDUARDO, vestidos con camisa y corbata,
cual pinches oficinistas, caminando hacia el ascensor




JESÚS: No mames, es María José la de Kabah.
MURADÁS: Claro que no.


El ascensor se abre


JESÚS [volteando hacia atrás]: Neta te juro que es María José.
MURADÁS (en tono impertinente): Te apuesto a que no.


Entra DOÑA MARÍA JOSÉ [despampanante, toda de negro y con el pelo lacio y largo, junto a un criado] y sube al ascensor. Se pone en la parte derecha del elevador y mordisquea sexymente una Rockaleta. A su lado, al centro está DON JESÚS. Al lado izquierdo del elevador, de su otro costado, están DON MURADÁS Y DON EDUARDO, mirando lascivamente a DOÑA MARÍA JOSÉ.

JESÚS: Oye me encanta tu canción.
MARÍA JOSÉ (intimidada): Gracias...a la orden...


En este momento, un silencio incómodo y casi sepulcral se apodera de la escena. DOÑA MARÍA JOSÉ chupetea su Rockaleta nerviosamente. El criado parece disfrutarlo (el muy pinche ladino). DON JESÚS mira desconcertado hacia ambos lados del elevador. DON EDUARDO enrojece. Transcurren 2 a 3 minutos así. Finalmente, DOÑA MARÍA JOSÉ se decide a hablar.


MARÍA JOSÉ (entrecortada y nerviosa): Oye pues compra el disco.
JESÚS: Sí, me dijeron que está muy bueno.


Las puertas del ascensor se abren en el segundo piso.


MARÍA JOSÉ: Sí, la neta sí está muy bueno. Pero pues yo qué te puedo decir...


DON EDUARDO Y DON MURADÁS huyen despavoridos


JESÚS [saliendo del ascensor] (indiferente y sin mirarla): Oye qué gusto encontrarte, mucha suerte, nos vemos.


Las puertas del ascensor se cierran.


EDUARDO [a DON JESÚS]: Verga, me das pena ajena.
JESÚS (sin entender por qué se habría de tener pena): ¿Poor?


Se escucha en crescendo la canción ¿Quién eres tú?




FINIS

lunes, 7 de mayo de 2007

Soy extraordinario porque soy México

"Algo está pasando en la Ciudad de México, es cultural, va a explotar y será grandioso"
Spencer Tunick


Como México no hay dos, cantaba mi abuela. Pues como España tampoco, y como China menos. Y aparte...Guatemala es...ps como México no...? - pensaba yo...

Pero era cierto: México de verdad presenta características típicamente únicas, no encontradas en ninguna otra parte del mundo. Por una o por otra, siempre resalta. Fascina. Y fue un norteamericano el que a través de una foto nos lo recordó.

Spencer Tunick reunió ayer a casi veinte mil personas en el corazón de este país, que es el Zócalo de la Ciudad de México. Como nunca antes en la historia (el récord anterior fue Barcelona con creo que 7,000 personas), esta pequeña muestra de mexicanos reiteró lo hermosos que somos. Mexicanos desnudos que confirmaron lo que la estatua de la Diana me había dicho hace unos meses: que se nos acabó el conservadurismo. O que por lo menos, estamos más dispuestos a levantarnos un domingo en masa a romper con los tabúes del pasado que a continuarlos. Que vamos nutriendo una responsabilidad lo suficientemente espesa como para ejercer nuestra libertad. Que nuestra manera de celebrar va siendo más bien gusto por la libertad que respuesta a la represión. Que somos uno y nuestra voz es sedosamente sonora. Que estamos cansados de pudores arcaicos y que además traemos ganas de aire nuevo, por todas partes. Literalmente.
Personalmente, estaba inscrito para ir, pero de repente - aparte de lo temprano en un domingo que fue la cita -, caí en el error de sentirme individual. De no sentirme agusto como para que mi cuerpo fuera fotografiado. Y la belleza de esta idea artística es precisamente esa: expresar que somos uno, que estamos unidos.

La desnudez, como color-incoloro del que nadie escapa, nos hermana irremediablemente, nos unifica, nos fusiona, hace evidente nuestra hermandad.
Y entonces, individualmente, se tiene panza, o se le va a los Pumas, o se es hombre, o se cree en Buda, o se es joven, o se tienen los senos caídos, o se está desempleado, o se trae un tatuaje escondido, o se creía en el Peje, o se tiene buena nalga, o se está casado, o se trabaja de nueve a seis, etc.

Pero encuerados todos, descubriendo nuestra esencia común, esa cósmica que contiene 35 razas (y para muestra los resultados del genoma mexicano), juntos todos, como país, las particularidades desaparecen. Se esfuman y no se alcanzan a percibir. Y es así cómo a través de estar desnudos el lente capta un ente sólo, precioso, en armonía con su también maravilloso entorno.

Y es así cómo me late el corazón fuerte, cómo me doy cuenta que trascendiendo lo individual, soy extraordinario cuando me uno a la gente que vive alrededor de mí: porque junto con ellos, soy México.